_X Lugar_ busca la inserción del arte dentro de circuitos no artísticos y lugares no convencionales –Sala de Cine X-, Y a la vez que se propone intervenir un espacio extrartistico y así generar un contexto de encuentro directo, una producción de situaciones en lugares donde normalmente no ocurre el arte; por tanto el objetivo fundamental de este proyecto, consiste en generar encuentros entre: las obras, el contenido cultural del espacio y el espectador, con el fin de reflexionar en los intercambios y reconfiguraciones del significado simbólico, tanto del signo artístico como del lugar en el que se enmarca.
PORNO / GÉNERO
Asistimos a una saturación pornográfica en la representación, en los modos de consumo y distribución de la imagen. El cine X aparece como productor de placer a través de aparatos de intensificación de la mirada y como un constructor de ciertos lugares de sujeto, que se normalizan a partir de las asignaciones tradicionales a los géneros.
La pornografía es un producto cultural a través del cual se puede entender la construcción del cuerpo, del placer y de la identidad sexual. Como nos dice Beatriz Preciado “La pornografía es una noción política que funciona como un brazo del biopoder y opera normalizando y naturalizando las relaciones entre los cuerpos”. Una película porno lo que nos propone son pedagogías de la sexualidad, nos dice como debemos utilizar nuestro cuerpo, con quien, en que lugar, en que momento… la pornografía produce performativamente modelos de sexualidad.
A partir de estas formas de construir el cuerpo y de significar la sexualidad, X Lugar se instaura como una contrapropuesta también de carácter político, que buscó problematizar la normalización y naturalización de los sujetos y de sus relaciones con la corporalidad y específicamente la sexualidad. Así X Lugar es una contra-pedagogía, que cuestiona las formas “naturalizadas” de los usos, las normas, las estrategias y los roles asignados en relación con los modelos normativos de la sexualidad.
Los proyectos aquí presentados funcionan como dispositivos moduladores de la percepción que pretenden arrojar luz sobre las condiciones al ver cine como aparato de control de la mirada, como dispositivo psíquico que construye sujetos, en el caso del porno, produce modelos de género. El cine X aparece como productor de placer a través de aparatos de intensificación de la mirada; la pornografía, es aquí entendida como una forma de control audiovisual de la sexualidad. Con este proyecto se pretende, empezar a darle un lugar de análisis a la pornografía, para dejar de mirarla como basura cultural e iniciar sobre ella una mirada critica y por que no, política.
CINE INMÓVIL / CINE DINÁMICO
La proyección de imágenes cinematográficas inició una tendencia hacia la transformación del cuerpo del espectador y específicamente hacia la inmovilidad de este; los asientos, las paredes, el techo, el bajo nivel de luz, la distribución espacial; hacen que funcione como un espacio arquitectónico con una disposición establecida para una única manera de ver. Esta gran estructura arquitectónica del cine es moderna, y su efectividad está asentada en la tensión entre la movilidad de la imagen en movimiento y la inmovilidad de los espectadores, dando por supuesto la total pasividad del consumidor cinematográfico[i].
Sin embargo no todas las salas de cine funcionan bajo esta lógica. Las salas de cine X, son tal vez de los espacios que, aun conservando los mismos parámetros arquitectónicos que garantizarían la inmovilidad en el espectador, son apropiados y habitados subvirtiendo cualquier lógica espacial establecida. Aquí, el espacio de adecua, para permitir que el público vaya y venga constantemente. Al contrario de una sala de cine convencional, donde nada debe distraernos de la pantalla; aquí se está en constante movimiento, en busca de alguien más que no necesariamente está atrás de la pantalla, allí el público transita en busca de encuentros con el otro, pasando a un “no-lugar” movilizador de sentido, a un espacio de configuración que expresa procesos de subjetivación en la metrópolis, propicio para buscar el amor sin compromiso[ii].
Estos espacios presentan dos características esenciales, en primer lugar teniendo en cuenta la definición moderna de pornografía como categoría higiénica, que se refiere específicamente a la regulación de la sexualidad de las mujeres en el espacio público; se podría redefinir la pornografía como una “política del espacio y de la visibilidad que genera segmentaciones precisas de los espacios públicos y privados”[iii]. En este sentido cabe resaltar que la presencia de las mujeres como espectadoras en este espacio es casi nula, aspecto que evidencia un lugar de presencias inminentemente masculinas y que mantiene a las mujeres al margen de esta experiencia colectiva, restringiendo su consumo, -el de las mujeres- al ámbito privado. En segundo lugar y en relación con las segmentaciones de lo público y lo privado, existe una tendencia generalizada hacia el consumo doméstico y privado de la pornografía, en detrimento del consumo público, aspecto que ha ido generando procesos de extinción de las salas de Cine X.
[i] Ver: “Hombre con Cámara de cine” dirigida por Dziga Vertov. 1929
[ii] Sanabria, F. 2004. “Los no-lugares del amor en la ciudad: una aproximación etnográfica a las salas X de Medellín” Boletín de antropología año/vol. 18, número 035. Medellín.Universidad de Antioquia.
[iii] Preciado, B. “Museo, basura urbana y pornografía” En: http://www.arteleku.net/zehar/wp-content/uploads/2009/01/preciado_es.pdf. Visitada: el 10 de Octubre de 2009.
1 comentario:
EL PLAZO DE LA CONVOCATORIA SE EXTIENDE HASTA EL PRÓXIMO MIERCOLES 3 DE DICIEMBRE, ÚLTIMO DIA!
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